Archivo de septiembre de 2020

ADIKOSORO: MILENARIO BALCON SOBRE EL VALLE DE BAIGORRI

domingo, 27 de septiembre de 2020

ADIKOSORO, ERROIBAR

Sin alejarnos de Sorogain, el tesoro megalítico de Erroibar es de tal valor que, es difícil de calibrar cuando caemos en la cuenta que han pasado  2.000, 3.000 o 4.000 años y los podemos contemplar, han soportado  terremotos, tormentas y ciclones para llegar hasta hoy y los podemos admirar, grandes ciudades romanas desaparecen sin dejar rastro pero un humilde crómlech permanece visible para poderlo estudiar, se inventaron leyendas y cuentos sin fin, pellejos de buey llenos de oro, cajones de piedra repletos de tesoros para consumo tabernero y pastores incautos que hirieron mortalmente a muchos de ellos, pero aún están, vieron pasar ejércitos e ideologías que, por avaricia, represión o religión, intentaron acabar con ellos y aquí están, testigos, pero no mudos del paso del tiempo, y nos hablan de ritos y costumbres, compañías y canciones, caminos y actividades, calamidades y frutos que, imperturbables junto a ellos recorren la misma ruta, prehistórica, milenaria, retorcida pero nuestra, tal vez guerrera, pero difícilmente voluntaria, donde desconfiar de entrada pronto cambia por amistad en la cocina, donde a la palabra amable se responde con hospitalidad y a la prepotencia con astucia, la franqueza se agradece y la solidaridad comparte, tesoros que no se ven pero se viven.

 

Panorámica de Aldudes desde Adikosoro

 

En la anterior entrada, vimos la ruta que hasta Sorogain llegaba desde las tierras bajas del Norte para recorrer la sierra de Labia camino de la Navarra media, dejamos de lado parajes de impresionante belleza y fenomenal patrimonio, fruto de la milenaria presencia del pastoreo estacional que por fortuna permanece vivo. Hoy pretendo empezar a rellenar estos huecos concretando estos parajes, no de manera exhaustiva, limitándome a lo más evidente, aunque dejando claro que hay mucho patrimonio que interpretar para “chalados” de futuras generaciones.

Croquis de situación de los megalitos en Adikosoro

 

monolito de Adikosoro con dos pequeños tumulitos asociados

Perspectiva desde Adi

A poniente de Sorogain se localiza el paraje de Adikosoro, en un descanso de camino a Urkiaga (Kintoa-Quinto Real), una preciosa senda, recorre la regata de Odia ascendiendo a Aratungo Lepoa donde se abre un magnífico pastizal de altura abierto al Norte, al Sur coronado por el monte Adi, paraíso de ciervos, yeguas y ovejas latxas, por el Este, la senda alcanza el collado en un bosquete de coníferas y justo desemboca en un escondido crómlech junto a la cerca. Solo tenemos que seguir la senda que desciende hacia poniente pero antes de llegar a la parte más baja a la derecha veremos un gran monolito tumbado con dos pequeños túmulos asociados,

Monolito de Adikosoro con sus tumulitos asociados

llegando a la depresión giramos al norte para seguir bajando y en la parte baja, antes de llegar a los dos grupos de crómlech encontraremos dos túmulos T1 y T2, algo ovalados,

Túmulos de adikosoro alineados

siguiendo al norte a pocos metros, empezamos a ver hasta 7 crómlech encadenados, unos muy visibles, otros no tanto y en el borde de la fuerte pendiente varios fondos de cabaña, unos y otros forman el conjunto de Adikosoro ekialde, (pinchar) C1, C2, C3, C4, C5, C6, C7,

Cromlech C 1 de Adikosoro E.

Crómlech C 2 de Adikosoro E.

Adikosoro E. C 3

Cromlech Adikosoro E. C 4

Cromlech Adikosoro E. C 5

unos metros al Oeste llegamos a otro grupo de bonitos crómlech, son los de Adikosoro Mendebalde, C 1, C 2, C 3, C4, C 5,

Adikosoro Mendebalde C 1

Adikosoro M. C 2

Crómlech C 3 de Adikosoro M.

Adikosoro M. C 4

Adikosoro M. C 5

veremos los cinco agrupados y muy cerca dos fondos de cabaña, F 1 y F 2.

Fondo de Cabaña F 1

Fondo de Cabaña F 2

Ahora debemos recuperar la senda inicial seguirla hacia el portillo de Gorosti Bizkar donde nos tropezaremos con otro crómlech,

Crómlech de Gorosti Bizkar

desde este mismo portillo si tomamos la loma que desciende en dirección nordeste a 700 m llegaremos al dolmen de Ahatarteko Oihana que pocos días ve el sol, pero tiene buen color.

Dolmen de Ahatarteko Oihana

En Adikosoro, si miramos hacia el Sur veremos la cumbre del Adi con un inmenso derrumbadero de cuarcitas, hasta el, acceden dos plataformas camineras como testigos de su utilización con fines ignotos.

Señalamos que entre Sorogain y Adikosoro existen catalogados un importante número de megalitos, principalmente crómlech, túmulos y fondos de cabaña, apartados de los itinerarios más comunes, son el túmulo Pilotasoro E, los crómlech Ezpelondo,

Crómlech de Ezpelondo

Isterbegi, Iturrunburu, Lizarzu C1, C2, C3, C4,

Croquis del conjunto de Lizarzu

los fondos de Larrondagorri E y M, Ortxola y Zelaieta que los podemos ver en sus enlaces.

También quiero evidenciar que mi afición y actividad se dio en un periodo inestable en la zona fronteriza y el acceso a medios documentales como físicos, no ofrecían facilidades que invitaran a trasladar esta práctica al estado francés por motivos ovios, no significa, que nos abstuviéramos de recorrer estos montes, sino que conociendo destacados prospectores que desarrollaban esta misma labor, nos propusimos la búsqueda y divulgación en el ámbito territorial  navarro y entramos en contacto con investigadores de los territorios adyacentes con el fin de compartir y poner en comun localizaciones y datos.

SOROGAIN: UN PASO PIRENAICO SALPICADO DE MEGALITOS

sábado, 19 de septiembre de 2020

 

Ruta pecuaria prehistórica de Urepel a Lizoain-Arriasgoiti por la Sierra de Labia

 

Los megalitos que jalonan la ruta, nos marcan el camino que aquellos primeros pobladores recorrían persiguiendo la caza, sin ser conscientes que sus correrías, no solo serían seguidas miles de años después, sino que esa misma caza, daría carta de naturaleza a una práctica como la ganadería, base y sustento de una creciente población hasta nuestros días.

Sorogain con sus pastizales de altura, siempre fue una ruta de primer orden, a veces destino y a veces camino, de paso tranquilo si el destino era lejano, otras furtivo, rápido y nocturno, si el objetivo así lo requería. Que el peligro, era un componente, solo hace falta recorrer las numerosas cuevas y simas y comprobar la fauna en ellas depositada, veremos en abundancia restos de osos, lobos y linces, como predadores mayores del Holoceno (11.500 años), junto a una larga representación de fauna actual tras dejar atrás la última glaciación, aunque no es extraño, hallar fósiles del Pleistoceno anterior. Sería un componente habitual de aquellas gentes, por momentos preocupante, pero no más que otros del día a día.

Los megalitos son los testigos, los marcadores arqueológicos y los ejemplos más antiguos que disponemos de un largo periodo temporal y humano, de unas prácticas y unos rituales que, de diferentes maneras fueron fijando en el paisaje, como un legado, un patrimonio que no siempre se ha sabido preservar, es necesario un esfuerzo para conocer, conservar y mantener, al menos de la misma manera en que hasta nosotros llegaron.

Dólmenes, menhires, túmulos, cistas, crómlech y fondos de cabaña, conforman el patrimonio megalítico, unos con función funeraria y otros no, todos importantes además de románticos vestigios de otras épocas, generadores de cuentos y leyendas que forman parte del acervo cultural de nuestro país y de todos los países donde se dio este fenómeno.

En esta pequeña entrada, queremos presentar esta ruta que forma parte con otras cercanas, de unos itinerarios que inicialmente se concebían con carácter nómada o semi nómada, para quedar fijadas hasta la era industrial como formas de alcanzar ferias y mercados, no siempre sin problemas, pero forjadoras de unas relaciones sociales y económicas.

La aparición de una frontera interestatal que seccionó el territorio Erroibartarra nos sirve de excusa para iniciar el itinerario en Urepel y finalizarlo en Lizoain-Arriasgoiti, uniendo la Navarra baja del Norte con la Navarra media al Sur, inventariando de alguna manera, los megalitos que lo jalonan.

Existió un viejo camino, usado los últimos tiempos solo por contrabandistas, para ascender, desde el pueblecito de Urepel hacia el portillo de Pilotasoro y en el collado de (pinchar aqui) Beardegi, encontraremos junto al mojón interestatal 148 un dolmen descubierto por José Miguel de Barandiaran en 1948, con las losas de su cámara desplazadas y su galgal expoliado; no debe extrañarnos que en parajes con tanta y tan larga vida pastoril, se reciclaran los materiales de estos monumentos para construir bordas y txabolas;

Dolmen de Beardegi junto al mojón 148 de la frontera inrterestatal

Croquis del conjunto de Pilotasoaro

pronto llegamos al portillo de Pilotasoro (Campo de la pelota), que como su topónimo indica, se trata de un lugar donde se juntaban pastores y resolvían sus desafíos jugando a la pelota, este el lugar fue de especial atención, al menos, desde la Edad del Bronce y vemos el dolmen (pinchar) Pilotasoro 1,

Dolmen de pilotasoro desde el Oeste

 

los túmulos del mismo nombre: T 2, T 3, T 4, T 5, T 6, (fichas pinchando)

Túmulo Pilotasoro 2 y al fondo T 3

Túmulo 3 de Pilotasoro

Pilotasoro T 4

Túmulo T 5

Pilotasoro T 6

el crómlech C 7 y los fondos de cabaña: F 8,

Fondo de Cabaña F8

  F 9, F,10. Enfilamos el valle hacia el Sur, a 660 m junto a la regata, se localiza el dolmen de Sorogain o Aztakarri,

Dolmen de Aztakarri o Sorogain

tiene una sola losa en el cráter y el resto esparcidas en su alrededor, como dato curioso contiene junto al galgal una pequeña cista al parecer también funeraria. 500 m más abajo, a la izquierda de la pista, veremos el hermoso crómlech de Santxoten Harria,

Crómlech Santxoten Harria

seguiremos adelante 540 m y también a la izquierda del camino tropezamos con el esquilmado dolmen de Zubimear,

Dolmen de Zubimear

tiene una sola losa a la vista y fue despojado del túmulo de piedras protector para utilizarlas en unas construcciones militares cercanas.

Avanzando 750 m, llegamos al dolmen de (pinchar) Asundegi

Desbroce de vegetación en el dolmen de Asundegi

descubierto en el 2006, bajo la carretera en su lado derecho, bien conservado y que se salvó por los pelos cuando se tendió la carretera actual. Seguiremos 785 m y poco antes de la casa albergue municipal junto al camino, tenemos el dolmen de Odiego Iparralde,

Dolmen de Odiego Ipar

totalmente despojado del galgal, solo conserva el peristalito y las dos losas laterales de su cámara, 100 m metros al sur, detrás de la casa vemos Odiego Hegoalde,

Dolmen Odiego hego

aunque un tanto maltratado en razonable buen estado de conservación; como dato característico de todos estos dólmenes diremos que su orientación es al Sur más que al Este. Desde este dolmen tenemos que tomar el viejo camino de aurizberri-Espinal, tras pasar una depresión a 80 m de distancia Encontraremos el túmulo Odiego  T 1,

Túmulo Odiego 3

de 8 m de diámetro, 0,60 m de altura, con cráter, recientemente descubierto.

Continuando por este camino ya dentro del término de Aurizberri y que nos llevará hacia la sierra de Labia, después de llegaremos a Arregi, a 750 m en línea recta, en un pequeño descanso a la derecha del camino, veremos el bonito dolmen de Arregi,

Dolmen de arregi 1

  fue descubierto por T. López Selles en 1961 y 120 m al sureste en un plano inclinado el túmulo de Arregipea.

Túmulo de Arregipea

A distancia aproximada de 300 m al Sureste en pleno bosque hallaremos el (pinchar) Menhir de Arregi

Menhir de arregi

y a distancia también aproximada de 46 m al sur el dolmen Arregi 2.

Dolmen Arregi 2, Erdikoa

 

Dolmen de Arregi 2

Desde este tomaremos dirección Suroeste hacia la regata y a 225 m, mas o menos, Arregi 3.

Dolmen de Arregi 3, Arrabio

Siguiendo el viejo camino, cruzaremos la regata de Itolegi para ascender al dolmen de Dondoro,

Dondoro, vista de la camara desde el norte

descubierto por Silvestre Irigoyen en 1924, bordeando las tierras de labor de Aurizberri, cruzando la carretera por el alto de Mezkiriz, tomaremos la loma hacia el bosque de Berragu y junto a la muga se localiza el dolmen de Arriurdin, fuertemente alterado por roturación,

Dolmen de arriurdin (Mezkiritz)

de este siguiendo el camino hacia Mezkiriz llegamos al menhir de (pinchar) Zidrain,

Menhir de Zidrain (Mezkiritz)

descubierto en 2016 por R. Castellot, situado junto a la plataforma de un antiguo camino hacia el cordal de la sierra de Labia que lo seguiremos hasta el menhir de Sakarteburu,

Monolito de Sakarteburu.

Menhir de Sakarteburu (Mezkiritz)

que como dato curioso tiene una laja de toda su altura  caída junto a él, posible evidencia de un accidente producido por un rayo, localizado por el guarda forestal R. Ballano.

Siguiendo el cordal llegaremos al túmulo de San Pau

Túmulo de San Pau

en el collado junto a la vieja calzada romana y muy cercano al lugar donde se ubicó la ermita de San Pau; continuando por el cordal, ahora en dirección de Aintzioa, llegaremos al dolmen de Balanketa,

Dolmen de Balanketa (Ardaitz)

descubierto por M.K. Manzanas e I. Gaztelu en 1995, continuando hacia el Sur encontraremos el hermoso dolmen de Argibel.

Dolmen de Argibel (Ardaitz)

Descendiendo al paraje de Ogal aquí veremos los dólmenes de Ardaitz 1

Dolmen Ardaitz 1

y Ardaitz 2

Dolmen Ardaitz 2

; desde Ogal descendemos hacia Ardaitz y pronto en la loma encontramos el dolmen de Etxaburu,

Dolmen de Etxaburu

bajamos al pueblo y a corta distancia al Sur del antiguo manantial, junto a la carretera vemos el dolmen de Ezkiregi,

Dolmen de Ezkiregi.

descubierto y excavado por J.M. de Barandiaran en 1934.

Continuando por la sierra hacia el sur y antes de llegar a la muga con Arriasgoiti (Zunzarren) vemos el precioso y bien conservado dolmen de Oiartzabal Ipar,

Dolmen de Oiartzabal Iparralde

Dolmen Oiartzabal Ipar

para cerca por el Sur llegar a Oiartzabal hego

Dolmen Oiartzabal Hego (Zunzarren)

ya en término de Arriasgoiti, desde este dolmen buscamos otra vez el cordal alto de la sierra y tras pasar Biorreta llegaremos al dolmen de Kabilarte

Dolmen de Kabilarte

y continuando por la loma para terminar, al de Garbalagoiti,

Garbalagoiti, vista de la camara desde el este.

dolmen de buen tamaño localizado por Rafael Ballano en 2005 y descender al valle de Lizoain por Beortegi

Estos no son todos los monumentos en este recorrido, pero son los más importantes de los hallados hasta ahora tanto en el paso de Sorogain, como en la transición al cordal de la sierra de Labia, pero tenemos la seguridad, que seguirán apareciendo manifestaciones megalíticas que enriquecerán todavía más estas rutas, sirva de ejemplo Odiego T3 recientemente hallado. Estos magníficos vestigios tienen la virtud de señalarnos la ruta por donde circulaban aquellas gentes con sus ganados, que no tenían por qué ser, los mismos caminos que hoy con los modernos medios se han abierto. Otro aspecto a tener en cuenta es, la utilización del origen y una parte del recorrido común a otros destinos, como esta misma desde Sorogain por la sierra de Esteribar a la cuenca de Pamplona, que la dejaremos para otra entrada. Por supuesto en estas laderas existen muchos monumentos que sumar a esta sierra, pero además de dudar, de su relación directa con la ruta que intentamos divulgar, muchos de ellos se localizan en rutas transversales que unían unas con otras, al modo y manera de las pasadas y traviesas en las cañadas medievales que llegaron hasta el s. XX.

Tampoco queremos ser exhaustivos, ni con descripciones científicas ni con recopilaciones bibliográficas, pues solo pretendemos divulgar ligera y gráficamente, sin demasiados textos, orientada mejor, a una práctica de naturaleza y senderismo con un aliciente más cultural, con un componente de aventura, pues algunos monumentos al no ser evidentes y no estar señalizados, exigen una pequeña especialización, sobre todo con la creciente reforestación que están esperimentando nuestros montes.